lunes, 6 de mayo de 2019

3:27

Esta clase de crisis suelen darme una vez cada cierto tiempo.

Esta clase de crisis de las que he intentado huir siempre: esa ansiedad, ese sentimiento de querer alejarme y encerrarme, sentir esa necesidad de causar daño solo para que te lo causen, porque soy demasiado cobarde para causarmelo de forma directa. Aunque ha diferencias de otras veces, esta vez logre darme cuenta, logre atajarlo antes de embarrarla como siempre y bueno, he logrado mantenerla en calma lo más que he podido pero me estoy haciendo daño a mi misma ha causa de no querer hacerle daño a nadie, nunca he entendido ese deseo mio: querer sentirme en la mierda y que me dejen sola, que la gente me eche en cara que no valgo para nada porque esta vez lo que siento es igual que las otras veces y una parte de mi pensaba que había madurado que, de hecho había dejado estos ataques atrás pero no, simplemente los había ocultado y vaya que había funcionado por un tiempo. 

Y; es que hace tiempo no me daba un insomnio.

A veces pienso si escribir es mi maldición, la mayoría de las veces escribo cuando me he sentido en la mierda y esta es una de ellas creo que esa fue una de las razones por la que deje de escribir tanto, era mas melancólica, mas dolida, más llena de rencores pues solía escribir en vez de hablar y bueno esta vez lo vuelvo a hacer. Quise dejar eso, quise enterrarlo en lo más profundo porque quería comenzar a disfrutar lo que la vida me brindaba, lo que estaba dispuesta a encontrar y disfrutar pero supongo que  este siempre será mi demonio. Me vuelvo una imbécil en todos los sentidos y aunque he querido hacerle daño a la gente porque lo peor de mi es ser sarcástica con los dolores de los demás me he controlado tanto que me sorprendo. Supongo que he llegado a querer más de lo que odiaba a las personas. 

viernes, 22 de septiembre de 2017

No sugestionada

Hace un tiempo perdi algunas costumbres debido a ti. No es algo tan mal, así como suena.
Simplemente hoy recordé las veces que solias molestarte que algunas veces mostrara de más; cuando ahora te quejas a veces de que no lo haga y lo cierto es que nunca tuve esa intención de mostrar nada.
Nunca he sido el tipo de chica que quiere mostrar sus curvas y no, no me averguenzo de ellas. Sólo que siempre me pareció mejor mostrar mi cara y que las miradas se desviaran a lo puro de mi.
Mi cara siempre me ha aparecido mas interesante que mis tetas y bueno, nunca he sido sexy ni me he tratado de comportar como tal, no lo soy ni quiero serlo y es lamentable que eso a veces opaque tu libido.
No me hago la interesante ni trato de exponer mis sentimientos, soy una caja cerrada llena de recuerdos e información que lo más probable es que a nadie le importe.
Nunca he querido parecer especial, ni loca, ni rara siempre me he dado a la tarea de solo ser yo y en realidad aún así creo que la gente no me conoce.
No le parezco sexy a nadie y tampoco quiero parecerlo ni serlo, sólo me importa ser sexy para mi misma y mostrar mis atributos a quien yo quiera porque la verdad es que siempre me gusta dejar que la gente se imagine más y no tenga de mí tantos hechos.
No juzgo a quien muestre sus curvas pero si juzgo a quien quiere que todas lo hagan.
Tal vez, es más necesario alguien que su libido este más concentrado en un pensamiento profundo que un par de tetas grandes y un culo que tocar.


El escrito de alguien molesto.

sábado, 18 de marzo de 2017

Tres = soledad.

Cuando mis manos se enredan en tus cabellos, no hay nada más placentero que eso. Tus ojos se tornan de color rojo cuando suelo llenar tu boca de inolvidables besos, a veces suspiro para disipar el peso que llevo en mi pecho tratando de que salga entre el aire que desecho ¿y tu cariño que haces para calmar tu propio peso? Porque no lo sé y quisiera a veces saberlo. Suelo esconderme en tu cuello para tratar de encontrar un poco de calma mientras tus dedos dibujan en mi espalda cosas sin sentido, cuando suelo recorrer tu pecho entre besos y caricias suelo mirarte algunas veces y veo como sonríes pero aun así todo se nubla al cabo de un rato, cuando me acuerdo de todo. A veces quisiera tener la dicha de sentirme siempre bien como cuando estoy contigo en la cama mirando el techo o mirando los ojos del otro, se siente bien, se siente seguro pero el problema viene cuando tu atención no está en mi y no te lo exijo cariño, es demasiado. Mi cabeza no coopera y no eres el culpable de ello o bueno, solo algunas veces sueles ser tú el causante de algunos daños y aún me cuesta aceptar que me hayas mentido pero no hay de otra, es la realidad. No me gusta ver tu teléfono en las manos, ni cuando quieres tomarme fotos teniendo la piel desnuda, odio sentir inseguridad en medio de un beso y odio como hablas de ella. Me odio a mi algunas veces por amarte y luego me odio por pensar que no vales la pena, no sé qué quiere mi cabeza ni sé que quiero yo sacar de ella, solo sé que en estos momentos quisiera borrar de mi memoria todas estas penas. 

domingo, 30 de octubre de 2016

Las flores

Una vez tuve un jardín lleno de flores.
Era la mejor vista para todos aquellos que querían poseer uno.
Yo, regalaba flores cada primavera ha aquella personas que iban a verlas pero, en una primavera no volvieron a florecer.
No quisieron recibir al sol y comenzaron a marchitarse
Yo en mi ignorancia no sabía que pasaba hasta que un día comencé a preguntarme: ¿Por qué las regalaba?
Las flores eran felices en el jardín; entre ellas. Les gustaban que las vieran pero cuando las regalaba las personas se cansaban de admirarlas y las dejaban morir, desechandolas cruelmente.
Las flores en su miedo no quisieron volver a florecer, no querían ser juego de algo cruel.
Y ese jardín que tenía lleno de flores, ahora no es mas que un jardín cerrado y marchito.
Fuera de las miradas, fuera de espectadores.
Sin flores ni arboles.
Sin nada que admirar.

domingo, 24 de julio de 2016

Escudos

Vivo escapando de la constante tristeza que me acecha; aunque algunas veces logra alcanzarme, dejo amarrarme y encerrarme dejando que haga conmigo lo que le plazca. Así soy yo, entre tiempo y tiempo no se quien soy hoy no sé quien seré mañana sólo se que estoy dañada y que la tristeza me ha alcanzado pero, esta vez no he querido escapar. La tristeza es una perra, su belleza es su arma y yo siempre caigo a sus pies, tiene un poder de convencimiento admirable y yo soy de una mente demasiado débil, ella hace lo que se le antoja y quiero algunas veces levantarme y ella me hace caer de nuevo en su vacío, en su interior y me pierdo en ella. En su belleza, en su atención, en su inigualable sonrisa y así es como engaña... Así es como me engaña, descaradamente y sin escrúpulos sin importarle nada, sin importarle yo y pensar que ahora siento como si para mi misma ni yo me importo. 

domingo, 24 de abril de 2016

Lejos

Mis días donde terminan siendo largos, te recuerdo.
Cuando la noche se alarga y el sueño no parece venir, recuerdo cada cosa, cada facción, cada respiración de ambos.
Recuerdo en las frías noches tus suaves caricias, tu respiración pegada en mi cuello y tus ojos mirando los míos.
Mi corazón pareciera que fuera a salirse en cada uno de esos momentos en los que debería supuestamente detenerse.
En mi cabeza el tiempo no se detiene, se acelera.
Por eso odio un poco los días solitarios, los días en los que no puedo verte.
Porque ahí es donde el tiempo corre más lento, donde las agujas de reloj parece pensar si avanzar o no.
Es como una maldición, es como si las horas se burlaran de mi.
Trato de jalar los días para volverte a ver pero es imposible, debo esperar...
Esperar que los días pasen lentos; y cuando finalmente te veo el tiempo pasa a través de mis dedos como arena.
Odio tanto eso...
Odio no poder estar contigo infinitamente hasta saciarme de ti,
Odio no estar contigo hasta que me fastidie de tu presencia.
Odio no poder dar todo mi amor en un solo día,
Odio frustrarme.
Odio quedar tan melancólica cuando te vas y quedar tan vacía.
Eso es lo que siento exactamente hoy, vacío.
Vacío que no se llena con nada solo contigo.
Y tu estas tan malditamente lejos...
Te siento lejos; y me lleno de tantas inseguridades que no se como calmar mi cabeza.
Ella es otra que me tortura en los días en lo que puedo pensar tranquilamente, y ella no calla.
Habla, habla y habla... esperando que yo le haga caso.
Pero llego a ser más fuerte que ella, bueno...
Algunas veces...




domingo, 15 de noviembre de 2015

Sin sentido

Entre estos días en los que consiste estar madrugandome, comiendo pizza fría mientras me encuentro nostálgica frente a un computador me hace sentir bien, extraña en cierta manera, pero bien. Me gusta estar llena de nostalgia, recordando los viejos tiempos; en lo que solía ser. En como odiaba muchas cosas y en como el me ha hecho amarlas y me doy cuenta en que me he convertido ahora, no me siento mal, en lo absoluto. Me calma el hecho de que he cambiado muchas cosas que en efecto debía cambiar, antes estaba en un cueva de la cual no quería salir, hoy me encuentro metafóricamente hablando en un campo donde se puede respirar aire fresco. 

Me he alejado de ciertas personas pero tampoco me arrepiento de eso, en cierta manera me gusta estar sola gran parte del tiempo que tengo libre porque me concentro en mi, aunque a veces espere cualquier mensaje suyo. A veces le hecho de menos, sobre todo en estas madrugadas donde solo pienso en lo que el y yo eramos, somos y podríamos ser... Pero este texto no se concentra realmente en el aunque divague demasiado, porque yendo directo al grano el hace que pierda mi poca cordura.

Entonces, retomando el punto que no tengo ya que a esta altura ni yo se de que estaba hablando lo poco que quiero decir es que me siento bien, tengo felicidad, soy feliz. Porque la poca gente que me rodea que esta ahí me hace feliz, me hace sentir que a pesar de que el mundo pueda estar cayéndose yo no me caeré, yo estaré ahí con ellos... Puede que extrañe un poco esos días en lo que la tristeza era lo que me movía, la tristeza en efecto me mueve algunas veces no en cantidad y constante como hace tiempo pero a veces me visita y son esos pocos días en lo que aprovecho para recordarles a las personas que las quiero porque son esos días donde me pongo mas sentimental que de costumbre.