miércoles, 19 de marzo de 2014

"El en la madrugada inspiraba tristeza. Su vista era vacía, melancólica. Cuando el creía que nadie lo veía. Cuando no sabia que yo lo veía podía darme cuenta como asomaba su vista por la ventana hacía el cielo y veía el plenilunio como si en su cabeza pidiera a gritos un deseo. Un consuelo y después de eso su rostro radicalmente cambiaba, ya no era tristeza sino esperanza y anhelo. El nunca se percataba de mi presencia por las noches y en lo más profundo de mi ser quería que lo hiciera porque yo al igual que el veía el cielo pidiendo un deseo: Que él me notara entre tanta penumbra." 

Detrás de las palabras.

Detrás de mis palabras tristes se oculta algo.
Una razón.
Un secreto que pide a gritos ser escuchado
Entre hoja y hoja se escriben palabras falsas para ocultar lo que de verdad se siente.
Escuchando música logro recordar lo que reprimo y a veces la melancolía me gana con ventaja.
Soy muda porque he decidido serlo; y peleo conmigo misma para poder escapar.
Tengo un trastorno de ansiedad que no puedo calmar y en mi cabeza hay laberintos que no me gustan recorrer
Mira detrás de estas palabras vacías y dime ¿Qué ves?
Mira más allá de mi actriz favorita que suelo ser yo misma.
Porque no he ganado reconocimiento por mi actuación pero me he ganado tu indiferencia hacía esto.
No te das cuenta, lo sé.
Pero, si decides ser mudo como yo lo soy ahora eso sería un grave problema.
Cuando trato de olvidar lo que quiero, alguien llega descaradamente a recordármelo y me abofetea con la realidad.
Porque este es el dolor que he llegado a sentir.
Te quiero y suele doler
Pero me gusta este tipo de dolor
Y puedo aguantarlo hasta que te des cuenta
Que sientes esto, al igual que yo.